Trata de recordar cuántas veces has visto el contenido de la bolsa de cosméticos de tus amigos y haz querido probar su nueva máscara en tus pestañas. Piense en cada vez que intercambió los lápices labiales con tus amigas o sobre esa fiesta cuando todas usaron el mismo lápiz labial. Y ahora, lea a continuación, cuáles son las consecuencias de compartir los cosméticos.
Cuando se trata de cosméticos, nunca se deben prestar. No se trata de ser egoísta, sino más bien de sentido común. La distribución de cosméticos incrementa el riesgo de transferencia de microorganismos patógenos. A partir de este momento, el riesgo de enfermarse es mucho más probable. ¿Qué cosméticos no deberías prestar?
#Cremas en tarro
Con cada inmersión del dedo en la crema o el bálsamo, consigues insertar grandes cantidades de gérmenes en el cosmético. No sólo los de las manos, porque se puede lavar las manos antes de la aplicación, pero también los de la cara. No hay problema si la crema sólo contiene tus bacterias. La situación empeora junto con el crecimiento del número de personas que usan esta crema.
#Brillo labial
La cuestión de la transferencia de gérmenes es muy común con productos para los labios. Se trata no sólo de brillos labiales, sino también lápices labiales y bálsamos para los labios. El uso compartido de cosméticos para el maquillaje de los labios y el cuidado de los labios aumenta significativamente el riesgo de infección del herpes, transferido de los labios de tus amigas. Las condiciones cerradas y húmedas del brillo labial ayudan a propagar el virus.
#Mascara
El intercambio de rímel conlleva riesgos similares al compartir el brillo labial. El embalaje hermético y la fórmula húmeda de rímel permite un rápido desarrollo y proliferación de bacterias. Los párpados y las pestañas manchados son el entorno ideal para que las bacterias causen enrojecimiento ocular o queratitis. Un rimel prestado puede regresar a ti con esas bacterias.
#Aplicadores de base
Prestar todo tipo de aplicadores es el mayor error de todos. La suave y húmeda superficie de esponjas, mezcladores de belleza y cepillos es el ambiente perfecto para las bacterias. El préstamo de estos accesorios puede conducir a problemas de la piel, incluida la infección por hongos.
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